El futuro del medio rural, a un clic de distancia
La pérdida de habitantes en el medio rural ha ido acompañada de la desaparición de algunos servicios: cierre de escuelas, comercios, desaparición de oficinas bancarias, reducción de servicios sanitarios o pérdida de servicios regulares de movilidad.
Con independencia de la introducción de fórmulas innovadoras que permitan dar continuidad a estos servicios, Internet se ha convertido en una ventana abierta al presente y al futuro, pues muchos de estos servicios se prestan hoy de forma digital.
Sin embargo, factores como la falta de cobertura de calidad o el envejecimiento dela población han contribuido a que exista una cierta brecha en el uso de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC), que se manifiesta, según datos del INE, en 6 puntos de diferencia en el uso diario de Internet ente las ciudades más grandes y los pueblos más pequeños.
La extensión de la fibra óptica por el medio rural o el incentivo de la contratación de Internet por satélite allí donde la cobertura es insuficiente son pasos en la buena dirección. Sin embargo, estas y otras acciones deben ir acompañadas de políticas y acciones de capacitación digital de aquella población que todavía se siente alejada de Internet y de los servicios que se prestan online.
De hecho, mientras el 75% de las personas con edades comprendidas entre los 16 y los 74 que viven en grandes ciudades confían bastante o mucho en Internet, el porcentaje se reduce hasta el 69,2% en los pueblos que tienen menos de 10.000 habitantes, según la misma estadística del INE.
Partiendo de esta realidad, en Pontevedra (Galicia) existe un proyecto dirigido a generar oportunidades en el medio rural a través de la tecnología. Especialmente para aquellas personas que se encuentran en situaciones de vulnerabilidad. Se llama RuralHackers, tiene carácter europeo, y busca llegar a perfiles de distintas edades y realidades.
RuralHackers enseña desde programación y diseño digital hasta cuestiones del día a día como pedir una cita al médico utilizando las aplicaciones o las páginas web, lo que permite, por un lado, ampliar las posibilidades laborales a quienes viven en la zona, y, por otro, mejorar las competencias digitales de las personas que se sienten más alejadas del ámbito digital.
RuralHackers es un proyecto que cuenta con el apoyo de SiteGround, una de las empresas que forman parte de Vivaces, que cuenta con 650 empleados en todo el mundo y se dedica a proveer servicios de hosting a más de 2 millones de clientes.
SiteGround proporciona a Rural Hackers las herramientas para que puedan ayudar a los negocios locales del medio rural a crear sus sitios web y con ellos expandirse y crear oportunidades de crecimiento.
"Según José Ramón Padrón, Country Manager en España, planteamientos como el de este proyecto permiten dar al medio rural un “acelerón extra en cuanto a tecnología”. “Nosotros podemos ayudar con lo que sabemos hacer, que tiene que ver precisamente con la digitalización”, explica.
El apoyo de SiteGround a Rural Hackers forma parte de la prioridad que esta compañía, que un día crearon tres estudiantes de la Universidad de Sofía hace dos décadas, le da a la sostenibilidad, y que se manifiesta en otros ámbitos como el ambiental, como muestra que Google compense el 100% de la energía consumida por sus operaciones comprando energía renovable por la misma utilizada.
Todo este trabajo es presente pero también es futuro. Futuro para las personas que pasan por Rural Hackers para aprender programación, competencias digitales o incluso inglés. Futuro para algunos de esos alumnos, que después se convierten en monitores. Futuro para quienes, con estas competencias, abren nuevas posibilidades. Y futuro, sin duda, para quienes quieren quedarse en el medio rural.
Un futuro que está a solo un clic de distancia.